Si sufres de hepatitis, insuficiencia biliar, fibrosis, hígado graso, artritis, colon irritable, colesterol, afección de muelas, dolor menstrual u otras dolencias, esta nota es de tu interés. Si estás pasando por épocas de estrés o en tu ciudad hay muchas personas contagiándose de gripe, sigue leyendo.
La cúrcuma es una planta hermana del kion, originaria de la India y utilizada en todo el mundo como una especia para cocinar. Sin embargo, la cúrcuma no es un simple saborizante; tiene innumerables beneficios para la salud. De acuerdo al Diario de la Sociedad Americana de Químicos, la cúrcuma contiene una amplia carga de antioxidantes, antivirales, antibacteriales, anticancerígenos, antimutantes y antiinflamatorios. Muchos expertos describen a la cúrcuma como un “ibuprofeno natural”, debido a sus propiedades antiinflamatorias.
La cúrcuma y sus beneficios extra para el hígado
La cúrcuma previene la formación de colesterol en la bilis; los extractos de la cúrcuma, al aumentar los antioxidantes del organismo, favorecen la desintoxicación del hígado, un vaciado de la vesícula biliar y, por tanto, mejoran la digestión y eliminan los gases
En algunos estudios incluso se ha demostrado que, a largo plazo, un consumo seguido de cúrcuma repara los daños causados por la quimioterapia y otros medicamentos usados para curar cánceres de hígado, duodeno y piel
¿Cómo utilizar la cúrcuma en nuestra comida diaria?
La cúrcuma es una planta que mide un metro de altura, sin embargo, lo que se utiliza es su raíz. Una vez molida la raíz, ésta se usa en la cocina como especia. Los expertos recomiendan combinarla con menestras, cremas de verduras, sopas, salsas o arroces a modo de colorante. Cabe resaltar que lo importante es no tener la cúrcuma al fuego por más de 15 minutos, dado que con ello se desaparecen sus principios activos en un 80%. Lo ideal es aplicarla al final de la cocción, cuando ya se han servido los platos.
Al consumir una pequeña dosis de cúrcuma todos los días, estás ayudando a disminuir tus dolencias y a curar tus enfermedades. Lo mejor de todo es que la cúrcuma no tiene sabor, ¡por lo que pueden agregarse a cualquier comida o bebida sin temor alguno! ¿Qué esperas para añadirla a tu dieta?.
